Tiempo de lectura: 5 minutos / Lars Buchwald / 02.09.2025

Perro y loro – Operaciones especiales de los bomberos y una experiencia de mi vida cotidiana

Contenido del artículo

→ Perro y loro – Operaciones especiales de los bomberos y una experiencia de mi vida cotidiana

→ Qué rápido puede suceder

→ En Múnich: Un mestizo de terrier y una pequeña ráfaga de viento

→ En Hamburgo: Un loro en la habitación equivocada

→ En Bonn: Piet y la sartén

→ Abrir puertas – gracias a los bomberos

A menudo son los momentos más insignificantes los que de repente pueden convertirse en un drama. Una ligera ráfaga de viento o incluso solo un segundo de descuido – y la puerta del piso se cierra de golpe. La llave queda dentro y, lo que es peor: la mascota también. En tales instantes no solo se enfrenta uno a una puerta cerrada, sino también a un problema bastante grande con un verdadero potencial de escalada.

Qué rápido puede suceder

¿Qué hacer entonces en una situación así? Ante todo, mantener la calma. Lo cual, en un momento así, no resulta nada fácil (más sobre ello más adelante en el texto…). Pero como el problema no se resuelve por sí solo, hay que actuar. Preguntas que debería hacerse primero: ¿tiene mi vecino una llave de mi piso? Si no, ¿quién podría ayudar a continuación? ¿Hermano, hermana, hijo? Si no puede responder claramente a todo eso y no hay otra posibilidad, entonces solo queda llamar a los bomberos.

Que tales situaciones no son ninguna rareza lo demuestran varios ejemplos – por ejemplo en Múnich, en Hamburgo y también ya en mi propia casa.

En Múnich: Un mestizo de terrier y una pequeña ráfaga de viento

Una mañana completamente normal en Múnich en el año 2022. El orgulloso dueño de un perro mestizo de terrier solo quería bajar la basura y coger algo rápidamente del coche. La puerta del piso quedó apenas entornada, pero ya a mitad de la escalera hacia abajo se oyó claramente el conocido y tantas veces escuchado “CLACK”, pues en ese momento una fuerte corriente de aire cerró la puerta. Dentro: el curioso, seguramente un poco inquieto mestizo de terrier. Fuera: su dueño bastante nervioso. 

No tardó mucho en que el perro ladrara con inquietud, los vecinos se dieron cuenta y el ánimo pasó rápidamente de “A ver, seguro que consigo abrirla” a “Vaya, no funciona – necesito ayuda”. Los intentos de abrir la puerta por su cuenta fracasaron, como era de esperar. Al final, no quedó otra opción que llamar a los bomberos. Equipados con una amplia gama de herramientas de apertura – las mismas que también utilizan los cerrajeros – los efectivos trabajaron con rutina y destreza. En pocos minutos, la cerradura hizo clic, la puerta se abrió y el perro estaba allí, esperándolos, como si hubiera pensado todo el tiempo: “Por fin, ya estaba esperando.” Y cualquiera que ame a los perros sabe lo que significa la mirada fiel de su compañero de cuatro patas. Un bonito final feliz para todos.

En Hamburgo: Un loro en la habitación equivocada

Un año antes, en 2021, los bomberos de Hamburgo recibieron una inusual llamada de emergencia: un loro había quedado encerrado accidentalmente en una habitación cerrada. Normalmente se le permitía moverse libremente por el piso – pero cuando entró volando en la habitación del anexo, la puerta se cerró tras él. El dueño intentó primero abrir la puerta desde fuera, pero sin llave no había nada que hacer.

El ave revoloteaba nerviosa, la preocupación aumentaba, y así acudieron los bomberos. Una apertura forzada no era una opción – demasiado grande el riesgo de asustar aún más al loro. Por lo tanto, se utilizaron herramientas de ganzúa. Poco después la puerta estaba abierta, el loro algo desconcertado, los dueños aliviados. Para los bomberos no fue una intervención rutinaria, sino un ejemplo de lo variada que puede ser su labor – y de lo mucho que a veces depende de manos firmes y de las herramientas adecuadas. Bien que los bomberos de Hamburgo fueran “auténticos lockpickers del norte”.

En Bonn: Piet y la sartén

Que estas historias no solo ocurren en las noticias lo he vivido yo mismo. Estaba sentado en una reunión cuando de repente sonó mi teléfono. Al otro lado, mi mujer completamente alterada: solo había salido un momento a tirar la basura – y justo en ese instante la puerta se cerró detrás de ella. Dentro estaba nuestro perro Piet. Y, aún más delicado: una sartén en el fogón. 

En segundos, mil pensamientos me pasaron por la cabeza. Corrí hacia el coche, pisé el acelerador y conseguí llegar a casa en poco menos de 20 minutos, cuando normalmente tardo 30. Por suerte, no había pasado nada – la sartén era ya chatarra, pero aparte de un breve momento de susto, todo quedó intacto. Piet estaba tumbado tranquilamente en su sitio, como si no hubiera ocurrido nada. Como recompensa, después hubo un paseo especialmente largo y muchas golosinas. Para nosotros fue una situación aterradora que muestra lo rápido que una situación cotidiana puede volverse peligrosa.

FAQ – todo lo que necesita saber.

Sobre la persona

Lars Buchwald forma parte del equipo de Multipick desde 2006, donde se dedica al marketing y los gráficos con pasión y pericia. Como diseñador gráfico y redactor publicitario de formación, aporta una gran experiencia y creatividad a su trabajo, lo que le permite transmitir los mensajes de las ingeniosas herramientas de forma atractiva y convincente. Con un agudo sentido de las necesidades del grupo destinatario, dirige los destinos de marketing de Multipick. Su trabajo se caracteriza por un alto grado de sensibilidad y el toque justo en el momento adecuado. 

Nacido en Bonn, Lars no sólo está estrechamente vinculado a la región, sino que también ha integrado firmemente su pasión por las herramientas de marketing en su trabajo profesional. Su apego a la ciudad se refleja en su trabajo y confiere a sus campañas de marketing un auténtico sabor bonnés.

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